domingo, 5 de septiembre de 2010


El curaca Capac, preocupado por sus palabras, procuraba inculcar a Uru 
el sentido de la responsabilidad de su futuro cargo. 
Todo era en vano : Uru malgastaba grandes sumas en adquirir telas exóticas,
adornos de oro y plata con que embellecía sus tocados, y pasaba indiferente
y desdeñosa ante los súbditos que se agolpaban alrededor de su killapu
sin un solo gesto benévolo ni humanitarios hacia ellos.
Por fin llegó el día temido en que el curaca falleció. 
Su muerte fue lamentada por espacio de siete días y siete noches,
con llantos y lastimeros cánticos religiosos con los que le expresaban su tristeza 
y su miedo por el destino que les esperaba en manos de la nueva reina. 
La joven, impresionada al principio por la muerte de su padre y su nuevo cargo,
obedeció en todo a Hamurpa y gobernó con verdadera inteligencia,
pero pronto se cansó de ello. Volvió a su vida egoísta y,
embriagada por su poder, malgastó cuantiosas sumas en cumplir con sus caprichos ;
pronto empobreció las arcas del palacio y comenzó a oprimir al pueblo
con elevados impuestos, con los que podría mantener sus gastos.
Un día en que Hamurpa y otros consejeros ancianos procuraban conmoverla
para que prestara atención a las necesidades de su pueblo,
Uru decidió desembarazarse de ellos. 
"Tomen prisioneros a todos los consejeros de mi padre y azótenlos
hasta que mueran -ordenó- imperiosa y soberbia. Desde ahora en adelante,
no conozco otros consejeros que mis deseos. Y no me importa que mi gente
se empobrezca o carezca de tierras y alimentos. Yo, heredera directa de los incas,
he nacido para gozar de la vida y ser obedecida". Y para ratificar su orden, 
tomó ella misma su cinturón trenzado en blando cuero de cabras
y comenzó a golpear a los ancianos sacerdotes. No pudo, sin embargo, 
proseguir con su furia destructiva, su brazo quedó paralizado,
y toda ella enmudeció ante una figura bellísima y majestuosa
que se presentó interponiéndose entre los sacerdotes y la reina.

1 comentario:

Belén dijo...

Preciosa, me encanta!!!
yo tengo una en la torre q se llama herminia, lleva unos días algo rara, no me hace caso ni nada, pero teje unas telas impresionantes y lo mejor esque ahora ya se porque ;)